VAYA DÍA

Los lunes es un puto día que te gustaría borrar de calendario cuando te suena el despertador a las ocho menos cuarto y te tienes que levantar para ir al instituto. Cuando ya estas allí no paras de vostezar y cada vez que lo haces te salen unos lagrimones que tu compañero piensa que estas llorando.Suena la campana para empezar la primera clase de la semana que es lengua y aunque el profesor es un tío de puta madre, con el que te ries mucho, no deja de ser lunes a primera hora y te echas una sobadita de unos veinte minutos que te sienta bastante bien. Pero lo peor viene a segunda hora cuando te toca educación física y todavía notas el cansancio del sábado por la noche y del partido del domingo con la "Agru". Y eso no acaba, porque te quedan unas cinco horas en el instituto con clases aburridas que muchas de ellas no te van a servir para tu trabajo, ciclo formativo o algo por el estilo. Menos mal que después de comer puedes echarte una siestecita de tres horas sino te llama el pesado de tu padre, diciendote que bajes al bar un rato para que la siesta se la eche él.