miércoles, 25 de febrero de 2009
Noche de sabado
Fuera, un clamor se empieza a oír desde lejos, muy tenue, y se va acercando. Aumenta como un tañido metálico, la puerta se va abriendo lentamente. Me escondo en el armario de mi habitación y miro por la ranura, una sombra se va acercando a mí lentamente con pisadas de gigante; Mi mente se bloquea impidiéndome chillar o salir corriendo. De pronto se empieza a abrir la puerta del armario y mi corazón se acelera hasta tal punto que no sabia si era verdad o mentira, sueño o realidad lo que me estaba sucediendo. Al apreciar el palo que llevaba en la mano no pude mas y me desmayé. Empecé a abrir los ojos lentamente, veía un poco borroso, me quise levantar pero no podía; Cuando por fín abrí los ojos, vi que estaba en una habitación vacía atada de pies y manos encima de una mesa. Me puse a llorar y a pedir socorro. De repente escuché el portazo de una puerta y las pisadas de alguien que se aproximaba, cerré los ojos, y al abrirlos estaba enfrente mía con un cuchillo y me dijo: ADIÓS! y de repente, de un salto, me levanté, era una pesadilla. Me volví a dormir.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Por dos veces has escrito con mayúscula después de ; , sabia, no pude mas, *enfrente mía, la puntuación, flojea... Demasiados sueños...
Publicar un comentario